Después de las ruinas que visitamos ayer, hoy decidimos ir a pasar un par de días en Flores. Gracias a un simpático conductor conseguimos salir de Tikal en el mismo colectivo que nos trajo aquí hace dos días. El trayecto es más corto de lo que pensábamos y ¡en menos de dos horas ya estamos mochileando por la isla!
Lo primero que tenemos que hacer es encontrar un lugar donde dormir esta noche, algo bastante fácil porque hay mucha variedad de B&B, hostels y hoteles. Lo que parece más difícil es encontrar un alojamiento que sea barato. Después de pasar por casi todos los hostels de la zona, lo más barato que encontramos hasta ahora es una cama en dormitorio compartido por 75QZL (12USD) cada uno. ¡Muy caro! Finalmente, en el Hostal Los Amigos conseguimos la mejor oferta por 60QTZ la cama (8.5USD), en un dormitorio compartido al aire libre. ¡La atmósfera del hostal es genial! Hay grandes áreas comunes con muchas mesas y sofás, además de un restaurante, lo que resulta un ambiente perfecto para conocer otr@s viajer@s (¡y el wifi es muy rápido!).
Dejamos las bolsas ahí y empezamos a explorar este pequeño pueblo. Flores nos transmite una muy buena sensación; cafés delante del lago, tiendas tradicionales, una plaza con vistas a toda la ciudad y calles empedradas. Todo esto junto a la arquitectura colonial, nos recuerda a Trinidad. ¡Nos encanta lo que vemos mientras paseamos!
Sin darnos cuenta, ¡en menos de 30min ya hemos caminado por todo el paseo delante del agua! En esa calle, delante de los botes que cruzan el lago hasta otra pequeña isla, se encuentra el mercado que vende comida local buenísima (pasteles, tamales, tortillas, tacos, arroz con pollo…) por 5-10QZL la pieza (como un dollar/euro el plato). ¡Aquí se encuentra la comida típica más rica y barata de toda la isla! ¡No te la pierdas!
De vuelta a nuestro punto de partida, decidimos subir por las calles más empinadas y llegamos a la plaza principal del pueblo. Es un lugar precioso. Aquí se encuentra la gran iglesia, un enorme árbol de Navidad, niños jugando a fútbol y unas vistas fantásticas de la isla. Disfrutamos de la escena sentándonos en un banco, sacando fotos y con una bebida en las manos. Por la noche, volvemos al mercado a comer algo y regresamos al hostel porque mañana nos levantaremos muy temprano: nos vamos a Cobán, en Baja Verapaz, ¡y el trayecto dura como 5 horas!
Este corto paso por Flores ha sido suficiente para entender que esta pequeña isla es fascinante pero demasiado turística para nuestro gusto. Puede ser una buena base para ir a visitar Tikal, navegar en barca por el lago y hacer tours en canoa o en tirolina, ¡pero desde luego no esperes que sea económico! Si quieres descubrir la Guatemala real… ¡¡¡empieza a dirigirte hacia el sur!!!
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