Thekkady: Las Vibraciones Salvajes de Kerala

By Connected Horizons

Después de despertar temprano y un desayuno rápido, subimos a un tuk-tuk y nos despedimos de Munnar. Dirección: ¡estación de bus! Llegamos justo a tiempo para no perder el nuestro, y en cuestión de segundos ya estamos dentro para obtener los mejores asientos del autobús (preferentemente dónde pueda estirar mis largas piernas). Motor en marcha, comida en nuestras mochilas, agua en los termos, los mejores asientos: Thekkady, ¡estamos listos!

Nosotros en el autobús hacia Thekkady

¡¡¡ VAYA VIAJECITO !!! Después de 5 horas zigzagueando entre montañas por carreteras muy muy estrechas para un bus, las plantaciones de té desaparecen lentamente para dejar paso al salvaje bosque indiano. Debo decir que si te mareas fácilmente viajando por carretera, recomiendo evitar hacer esta ruta en bus; yo normalmente puedo escribir y leer en coches/autobuses/aviones y no tengo ningún problema, pero ¡esta vez tengo que mirar continuamente por la ventana para no marearme! Como siempre, para la gente de la India este viaje es tan fácil como beber un vaso de agua. En fin, llegamos a Thekkady al mediodía y está lloviendo… no es la mejor bienvenida pero somos positivos, una habitación calentita y preciosa nos está esperando. Después de preguntar a varias personas, conseguimos un tuk-tuk que nos lleva al Pepper County Homestay (por cierto, pide una habitación con las vistas, vale muchísimo la pena). Allí, el propietario nos está esperando y nos enseña probablemente la mejor habitación que hemos visto en todo nuestro viaje. ¡WOW! La vista desde el balcón es espectacular; el sol enmarcado por los árboles, la belleza selvática delante de nosotros… ¡parece demasiado bonito para ser cierto!

Después de una ducha reconfortante nos damos cuenta de que también cae una buena ducha fuera de nuestra habitación: la tenue lluvia que había al llegar ahora es un torrente de agua encima de la vegetación de los pueblos de Kumily y Thekkady. Decidimos que hoy podemos tomarnos tiempo para relajarnos; un té caliente en esta habitación no suena nada mal. Disfrutar de las vistas: este bosque inmenso, el sol poniéndose en el horizonte… es mágico. Terminamos el día con una cena buenísima hecha por un cocinero muy simpático del mismo Pepper Homestay, y a dormir. Mañana nos levantamos temprano… ¡nos espera un día de rafting sobre bambú!

Rafting sobre bambú en Periyar

Nos despertamos a las 6am con este pensamiento y vamos a por nuestra primera aventura dentro del Parque Nacional de Periyar en Thekkady/Kumily. Ayer, mientras todavía estábamos en el pueblo, conseguimos llegar al Ecotourism Point (hay que estar atento porque hay muchos sitios que no son oficiales) y reservamos otras dos excursiones más para hoy, a parte del Bamboo Rafting.

Llegamos a la entrada del parque nacional mientras vemos el sol salir por el horizonte y el calor empieza a meterse a través de la jungla. Nos dan la bienvenida 4 guardabosques y nos explican que ellos serán nuestros guías. ¿Tigres hambrientos, elefantes enfadados, cobras cabreadas? ¡Ellos se harán cargo de todo en cuestión de segundos! (Oh, me olvidé mencionar las sanguijuelas…) El Bamboo Rafting Walk fue la única excursión que reservamos desde casa antes de partir, porque se llena muy rápidamente y no queríamos perdernos la experiencia. Dudábamos entre reservar un viaje en ferry o esta excursión, pero nos decidimos por reservar ésta porque incluye el paseo en plena naturaleza salvaje.

El lago principal detrás de la estación de ferry

Y ésta, amig@s mí@s, fue una decisión que nunca lamentaremos; la excursión que elegimos fue un regalo tras regalo para nosotros, ¡fue algo inolvidable! Dos horas de caminata a través de la jungla (5km) para llegar a un sitio menos turístico y un lago muy especial; ardillas gigantes, monos, pieles de cobra y una gran variedad de pájaros son sólo algunas de las maravillas que encontramos. Y boquiabiertos… llegamos a este precioso lago, que parece copiado de una película de fantasía. No hay ni rastro de humanos, árboles secos surgen de la superficie del agua y el frondoso bosque rodea todo el paraje, ¿sueño o realidad?

El lago por el que navegamos sobre bambú

Después de un rápido almuerzo con estas vistas desde un refugio forestal, empezamos la sesión de rafting con la esperanza de ver un poco más de vida salvaje indiana, y a poder ser más grande. Pues parece que nuestros deseos se hacen realidad, porque después de 5 min remando por estas aguas… ¡¡elefantes a la vista!! No nos lo podemos creer, por el horizonte vemos una gran manada de elefantes bañándose, bebiendo y jugando allí donde la jungla confluye con el lago. ¡Sencillamente increíble!

Una manada de elefantes indianos

Los guías nos dicen que si queremos, podemos acercarnos un poco más e ir hasta el pedazo de tierra que queda cerca de ellos; eso sí, debemos mantener una distancia de seguridad para no asustarlos. Sacamos fotos, fotos y más fotos, y volvemos a nuestra pequeña nave de bambú. Durante el resto de nuestro viaje también vemos muchos ejemplares del precioso martín pescador, cormoranes, garzas y muchísima más fauna asombrosa (aunque ni rastro de tigres); ¡una mañana fabulosa!

Un cormorán relajándose bajo el sol

También vemos lugareños pescando en esas aguas y el guía nos explica que ellos son los únicos que pueden vivir aquí; sus familias vivían en este parque mucho tiempo atrás, antes incluso de que se creara este parque nacional.

Una lugareña pescando en la orilla del lago principal

A las 12.30pm ya estamos de vuelta al campo base. Seguramente otros turistas ya estarían satisfechos, pero nosotros tenemos ganas de más: ¡la excursión llamada Nature Walk nos está esperando! Ayer en la oficina de turismo nos dieron la posibilidad de escoger entre las 10.30am, 12.30pm o 2.30pm, pero la ruta es distinta según la hora. La mujer de la oficina nos explicó que olvidáramos ir temprano y que fuéramos a la última excursión; ésta lleva a una área menos frecuentada del parque dónde la naturaleza es más “natural”.

Una familia de monos que conocimos durante la Nature Walk

Una vez más… ¡damos en el blanco! Durante las 2 horas de senderismo, nuestro simpático guía Sunjith comparte con nosotros todo su conocimiento sobre el lugar. Ya sea una planta, una araña, un insecto diminuto o un mono haciendo sonidos extraños, Sunjith sabe de qué se trata. Su inglés puede que no sea su mejor fuerte, pero la forma en que expresa sus historias es probablemente lo más cautivador; qué hombre, no hay duda de que él hizo que nuestra excursión fuera todavía más encantadora de lo que hubiéramos podido desear.

Una parte del sendero de la Nature Walk

Pues sí, ambas excursiones valieron la pena, cada paso que hicimos entre la jungla (20km en total!!) fue impresionante. La Nature Walk fue especialmente excepcional: 3 horas totalmente rodeados por vida salvaje y acompañados por un experto que nos enseñó mucho sobre la fauna y flora de Kerala. ¡No podríamos esperar nada mejor! Si pudiera, ¡lo hubiera repetido miles de veces!

Volvemos a las puertas de entrada del parque dejando la humedad de la tarde; ahora la brisa del atardecer nos acompaña. Nos despedimos de Sunjith dejándole una buena propina, sacándonos una foto con él y la promesa de recomendarle cuando volvamos a nuestros países. Ahora nos merecemos un snack en uno de los muchos restaurantes que hay en la calle principal. Nuestra sed de explorar el parque natural no se ha saciado todavía (¡a pesar de los muchos kilómetros que hemos caminado!). Tenemos un último encuentro con la naturaleza esta noche: ¡el Jungle Scouting! A las 9.30pm, inicia nuestra excursión con linternas para descubrir la vida nocturna del parque Periyar. Esta vez es menos fascinante que las excursiones previas, porque todo consiste en alumbrar con las linternas a los pobres animales que están durmiendo o relajándose en la oscuridad para sacar fotos. Este no es el tipo de fotografía que me gusta; es verdad que vimos animales interesantes, pero no creo que merezcan ser molestados por turistas en medio de la noche.

Uno de los muchos animales que vimos durante la patrulla nocturna por la jungla

Finalmente a medianoche, después de una gran cena en el pueblo, volvemos a nuestras queridas camas y nuestra preciosa ducha caliente. ¡Qué día! Completo, largo, duro, especial, hermoso y lleno de sorpresas. ¡Hoy podemos decir que realmente hemos aprovechado cada minuto! Ojalá pudiéramos estar más tiempo, hubiera sido genial pasar uno o dos días más aquí, pero las backwaters de Kerala nos están esperando.

Buenas noches Periyar, ¡puede que nos veamos de nuevo!

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